Participación ciudadana para reducir la contaminación

Ya son muchas las noticias que nos llegan de diferentes medios de comunicación evidenciando la importancia de los proyectos de salud pública.

El 6 de septiembre se presentó el último informe de evaluación de la calidad del aire, elaborado por la Agencia de Salud Pública de Barcelona, donde se afirma que «al menos 351 personas han perdido la vida en la capital barcelonesa debido a un exceso de partículas PM2.5 (vinculadas al tráfico rodado) en el 2018 «, una cifra equivalente a la del 2017.

Además, los resultados obtenidos durante el 2018 en Barcelona muestran que actualmente se siguen superando los niveles de referencia de la OMS para el dióxido de nitrógeno (NO2) y para el material particulado (PM10 y PM2.5) en la capital. El informe también hace hincapié en que la exposición crónica a niveles elevados de contaminación contribuye a incrementar las enfermedades respiratorias y cardiovasculares, el cáncer de pulmón y la mortalidad.

Estas cifras y datos no nos dejan indiferentes. Por este motivo es de vital importancia la implicación de la población en proyectos como el BiSC, donde se pretende estudiar de forma detallada este tipo de contaminación en uno de los colectivos sociales más vulnerables como son las mujeres embarazadas y sus bebés. Y en definitiva, pensar en el futuro que ofrecemos a las nuevas generaciones.

En el siguiente link encontrará el último informe de evaluación de la calidad del aire de la ciudad de Barcelona .

La noticia ha sido redactada por Berta Miralles, trabajadora de campo del proyecto BiSC.