El equipo de BiSC os desea un feliz verano y buenas vacaciones!

El último texto antes de volver a abrir la sección de noticias en Septiembre es una reflexión que Maria Torres, investigadora predoctoral del proyecto BiSC, ha querido compartir con todas vosotras.

Un año más llega el verano y con él, unas más que merecidas vacaciones para todos. Este año, ha continuado siendo extraño e insólito. Para poder afrontar la situación actual en la que nos encontramos, de vez en cuando, me gusta recordar el significado de dos palabras que nos ha dado nuestra lengua: resiliencia y esperanza. La resiliencia es la capacidad humana de superar y recuperar la estabilidad en situaciones adversas y aprender a sobreponerse a ellas, en un ámbito más psicológico, no sólo gracias a la resiliencia uno es capaz de afrontar las situaciones límite, sino que también se puede salir fortalecido. Por otra parte, la esperanza es un estado de ánimo optimista que surge cuando se piensa que es posible conseguir lo que uno desea. Ahora mismo, pienso que todos nosotros deseamos ver la luz al final de esta tormenta que ya hace casi un año y medio que dura, aunque muchas veces cuesta mantener ese «ánimo optimista». Ahora bien, debo comentar que no soy muy fan del origen mitológico de la palabra «esperanza» y de la expresión «la esperanza es lo último que se pierde». En la mitología griega, se explica su origen a través del mito de la caja de Pandora. Según el mito, Prometeo robó el fuego a Zeus (Dios que gobernaba el Olimpo) y se los entregó a los hombres. Esto no le hizo ninguna gracia a Zeus, que a modo de venganza creó a Pandora y la regaló al hermano de Prometeo junto con una caja cerrada que contenía todos los males del mundo. Pandora, con una curiosidad innata suscitada por los Dioses, abrió la caja para poder ver su contenido y así es cómo liberó todas las enfermedades, sufrimiento, guerras, hambre, envidia, ira …, a la humanidad. Pandora, asustada, cerró la caja rápidamente quedando sólo dentro la esperanza (de ahí: «la esperanza es lo último que se pierde»). Como he mencionado, no soy demasiado admiradora de este origen básicamente por la visión misógina muy frecuente en la mitología griega, en este caso pone a Pandora, una mujer, como «el origen de todos los males».

También en lo que posiblemente significa el hecho de que la esperanza estés incluida en la caja de todos los males, no me gusta ver la esperanza como un mal, sino como un estado mental positivo que nos ayuda a estar más cerca de alcanzar nuestros objetivos vitales. También debo comentar que en el mismo mito existen múltiples interpretaciones y teorías en torno al sentido que se le da a la esperanza dentro la caja, si es un mal o no. Esta cuestión queda, por tanto, abierta a debate.

Con todo esto, sólo quería compartir un recorte de nuestra historia y cultura cómo humanos que somos y desearos por parte de todo el equipo que formamos BiSC unas buenas vacaciones de verano.

Muchas gracias por formar parte de este proyecto, para formar parte del conocimiento científico y para continuar apostando por la salud y la ciencia.

Un abrazo,

Maria Torres Toda